Playa

Playa

26 de enero de 2012

Engañando a la esperanza

Aprenderé a aceptar que en esta vida no estarás conmigo, que hay cosas inalcanzables a pesar de lo sentido, aceptaré que tu frialdad es tan grande como mi cariño, y aprenderé a andar sin ti como lo hacen los niños.
Aprenderé a no sufrir cuando un amigo te nombre, y aceptaré que no vendrás aunque en silencio te llame todas las noches, aceptaré que aquí he de pararme aunque valgas la pena, aceptaré que no es el mismo cariño el que recorre nuestras venas, supongo que no es suficientemente valiosa mi ilusión, aunque ni siquiera me atreva a ponerle precio a tu corazón.
Aprenderé a estar contigo y controlar mis emociones, intentaré no encoger el corazón de esta manera cuando escucho tus canciones, aprenderé a guardar todos los besos que cada día mueren en mis labios, aprenderé a pensar en otra cosa que no seas tú a diario.
Pero antes de irme quiero que sepas, que se me escapa la voz, como de aquella canción decía su letra, y que hoy tararea mi corazón, entiende que me voy con tu sonrisa en mi rostro, y con el corazón cargado de sentimientos aunque te parezcan pocos, me voy con las lagrimas de tristeza que robe de tus ojos, porque quiero verte feliz aunque me mate que algún día sea con otro.
Me voy adorando de ti hasta el último defecto, a pesar de que son pocos y te hacen inmensamente bonita, sabiendo que sentirte así hace los días perfectos, pero que alejarse de estos suspiros es lo que mi alma necesita, me voy dejando sin dudas a la mujer que ha tumbado mis esquemas, sabiendo que muero por tu madurez y que irme así es lo que más me quema, me voy sabiendo que me quedan 19 días y 500 noches como a Sabina, y que durante mucho tiempo serás aunque no lo entiendas la mujer de mi vida, la que ha sabido despertar los sentimientos más maduros y profundos, esa mujer por la que la gente cuenta que moverían el mundo.
Me voy pero me quedo, me quedo con las ganas de darte mi ultimo abrazo, me quedo con las ganas de robarte un beso aunque no me hagas caso, me quedo con las ganas de hacerte el amor como solo se hace cuando uno vive por la otra persona, me quedo con las ganas de probar tu cariño que debe ser lo más cercano a la gloria, me voy pero no a mucha distancia, porque por si no lo recuerdas más de una vez he muerto por tu espalda al oler tu fragancia, me voy pero sigo tan cerca como siempre, porque se van mi sentimientos pero yo fingiendo que no te quiero estaré presente.
Me voy sabiendo que esperar algo de ti no es mi derecho, pero antes de irme quiero que sepas que no me arrepiento de nada de lo que he hecho, de hecho ahí te quedas; madura, especial y para mi corazón infinitamente bonita, mientras que yo me voy con las manos tapándome la boca y sintiendo como mi corazón te grita.

2 comentarios:

  1. Cuando uno siente de verdad las palabras fluyen solas. Me encantaría poder expresar mis sentimientos con esa facilidad y poder escribir lo que en realidad pienso.

    ResponderEliminar
  2. Tu comentarios, siempre son un placer leerlos. Un Besazo María!

    ResponderEliminar